martes, 28 de junio de 2016

Ansiedad, o como morir cien veces en el mismo segundo

Renacer es quizás la principal virtud de los ansiosos. Nadie puede morir y renacer tantas veces y en tan pocos segundos como alguien que se deja caer en la ansiedad.

Como explicarle a alguien el torbellino emocional por el que se acaba de pasar, segundos después de haber sufrido un ataque ansiedad. y ahí esta uno, con el pelo revuelto como después de que una ola lo arrase fingiendo la mejor cara de poker y tratando de llevar adelante una conversación casual, que quizás esconda mas señales que una carta de amor desesperada.

Nadie puede morir de ansiedad, eso suena cierto, pero como pararse en medio de una caída. Como frenarse a uno mismo cuando ya el cuerpo y las manos mandaron ese mensaje. O cuando ya se dijo mas de la cuenta y lo único que queda es la desnudez del ser. Totalmente sincero. sin filtros ni prejuicios. y totalmente enfocado en conseguir lo que uno piensa que necesita.

No son las 5 am de un sábado. Son las 23hs de un martes. Pero se ve que algo falla en el reloj biológico. Y no hay mar que cure esta sed. Pucho en mano. Aire contenido. Cuando la ola te revuelca nada mejor que llegar hasta la orilla, así sea sin traje de baño, pero con los pies en la arena.